Festival internacional La Guarimba 2015. Presentación
La pantalla de Cine: Un refugio para el alma del pueblo. Por Matias Colantti
“No tengo mucho recuerdos del cine. Siempre he ido con mis amigos. Era una manera de estar juntos”
Esta cita la extraje de uno de los cientos de anécdotas que se visualizan en la página de Facebook oficial de la Guarimba. Hay muchísimas historias contadas por diferentes personas sobre sus experiencias o pensamientos en cuanto al cine allí en Amantea (pequeña pueblo de Calabria, región al sur de Italia) pero decidí arrancar la presentación del Festival Internacional La Guarimba 2015 con este pequeño relato por una razón en especial, y que tiene que ver con mi intención de dejar en claro, con esas pocas palabras, cual es el espíritu que profesa este Festival Internacional: Unir a los pueblos a través, con y desde el arte.
Giulio Vita, director artístico, y Sara Fratini, ilustradora, engendraron esta idea de un festival junto al colectivo del Tornillo de Klaus. Para concretar este anhelado sueño que surgió en Madrid, mientras realizaban sus estudios, Giulio Vita decidió regresar a su tierra de origen en Amantea para forjar allí el proyecto que idearon con su socia. La motivación se incrementó cuando se encontraron con la desoladora situación de que los cines se encontraban cerrados por falta de público, y en esa circunstancia encontraron en el Arena Sicoli un espacio perfecto para reabrir las puertas culturales del pueblo e invitar a diferentes realizadores del mundo para que exhiban sus producciones. Es así que en 2012 se inaugura la primera edición del Festival Internacional de Cortometrajes La Guarimba en una sala al aire libre con 938 sillas, y que con su crecimiento año a año llega al 2015 con el lanzamiento de una tercera edición del festival que se podrá compartir del 7 al 11 de Agosto, donde esa sala al aire libre pasa las fronteras comunitarias del pueblo italiano y llega a todo el mundo a través de Internet.
Aquella frase de un pueblerino de Amantea sobre sus experiencias con el cine se unifica en la expresión más popular y democrática que el siglo XXI puede representar y que tiene que ver directamente con la posibilidad de acceder al Festival a través de Internet. La comunidad virtual de las redes sociales está invitada a disfrutar de la exhibición de 45 cortometrajes que están disponibles en la página oficial de La Guarimba y que representan una diversa cantidad de producciones audiovisuales de todo el globo. La selección oficial cuenta con tres categorías: Ficción (20 cortos), Animación (15 cortos) y Documental (10 cortos). El ganador de cada categoría, se llevara el «Mono de Madera» entregado por el prestigioso jurado que preside el certamen.
La propuesta cinematográfica del Festival Internacional La Guarimba 2015 es realmente variada y plural en todos los sentidos (estética, contenido, origen, géneros, etc.). El espíritu indie y la necesidad de construir un espacio alternativo a las industrias del mainstream, permite que se visualicen obras de otros circuitos, a pesar de que hay ciertos cortometrajes de la órbita comercial, como The Bigger Picture (Daisy Jacobs, 2014), nominada al Oscar, que está entre las competidoras de la categoría de Animación, y que comparte el lugar con muchas otras obras de diferentes partes del mundo.
En Ficción, el panorama es bastante promisorio y desde la geografía europea se destacan Inspection (Gala Shukanova, 2014) y Gummifaust (Marc Steck, 2014). El primero, dirigido por la cineasta rusa Gala Shukanova explora las profundidades de la ruptura infanto-maternal y que tiene como verdugo infalible al aparato estatal de los Servicios Sociales que busca ser la cura de la aparente desarticulación de los vínculos afectivos. Un equipo integrado por una asistente social, un camarógrafo y una policía visitan una casa, con el objetivo de realizar una inspección sobre las condiciones de vida que tiene una niña que convive bajo la tutela de su madre que sufre de alcoholismo. El segundo, es un cortometraje de origen alemán que en clave de humor negro narra una peculiar situación protagonizada por un periodista crítico en una pequeña sala de teatro donde un grupo de jóvenes interpretan una versión moderna del mítico relato de la Tragedia de Fausto. La oferta latinoamericana de ficción no se queda atrás y entre los contenidos, podemos encontrar a Eu quería ser arrebatada, amordacada e nas Minhas Costas, tatuada (Andy Malafia, 2015). La historia centra la mirada en un Rio de Janeiro decadente y marginal, en donde Silvana es una mujer de la noche que se gana la vida como bailarina en un club desnudista de mala fama. La estética realista y la fotografía representativa de los suburbios periféricos ahondan en la temática de la invisibilidad de seres humanos a los que el mundo moderno ha desplazado y les ha dado la espalda.
A prestar atención a estas obras puntuales e igualmente echarle el ojo al resto de las producciones que integran la selección ficcional como el corto israelí Line of Grace (Rotem Kapelinsky, 2014), el experimento estético canadiense de The Dollhouse (Chad Galloway, 2014), Balls (Janne Schmidt, 2013), Don’t Speak About Love (Hadrien Bitchet, 2013), A Wekend Getaway (Metehan Yilmez, 2014), o Persefone (Grazia Tricarico, 2014), entre otros.
En el área de la exhibición animada, el festival da la oportunidad de descubrir verdaderas joyas del género y que pertenecen a los más variados circuitos, con referencias de premios internacionales entre la mayoría. Como había dicho al principio, se encuentra disponible el reciente ganador del Premio Bafta a mejor cortometraje del año y nominado en el Festival de Cannes y los Oscars: The Bigger Picture. Desde una propuesta estética que combina las técnicas gráficas del 2D y 3D, la obra animada británica que ha sido la favorita de los festivales más “prestigiosos”, cuenta la historia de dos hermanos que sufren los conflictos tradicionales sobre el cuidado de su madre y los debates sobre su internación en un geriátrico. La narrativa plástica y caricaturesca del trazado figurativo es uno de los puntos más fuertes más allá del moralismo tragicómico que expresa su diegesis. En la vereda del under, puedo hacer alusión destacada de los cortometrajes Haircut (Virginia Mori, 2014) y Brian Worm (Rose Stark, 2014). La ilustradora italiana Virginia Mori nos da el lujo de disfrutar un experimento cinematográfico único, principalmente desde la postura estética. Su marcada carrera profesional en el dibujo expresan gran parte de su más bello repertorio, recordando el puntual estilo de representar una historia trazada a lápiz y con sus clásicos personajes femeninos envueltos en atmosferas oscuras y de soledad. Y, en segundo lugar destaco la exhibición del corto islandés Brian Worn que trasciende por su búsqueda artística similar al simbolismo visual de Michael Dudok y la narrativa oscura de densos ambientes tétricos que me recordaron a la génesis negra de las criaturas burtonianas o el bestiario de la literatura de Edgar Allan Poe. Agendar también a Timber (Nils Hedinger, Suiza, 2014), Snowfall (Conor Whelan, Irlanda, 2015) que cuenta una divertida historia de una fiesta de amigos y la obra polaca Endemi’s Greed (Natalia Dziedzic, 2014).
Y por último, en la categoría de Documental la competencia se pone difícil por la cantidad enorme de magistrales films que luchan por el aprecio final de su jurado, pero que seguro se llevan todos los aplausos de los espectadores. Entre estos tesoros del doc destaco la premiadísima obra argentina La reina (Manuel Abramovich, 2014). Llega a este festival con la espalda llena de reconocimientos entre los que se vale el galardón al mejor cortometraje documental en el DocumentaMadrid 2013, el segundo premio en el BAFICI y su nominación estelar en los premios Cóndor de Plata. El film, dirigido por Manuel Abramovich, gira en torno al hostigamiento de los niños en la conquista exitista en el deporte y los certámenes competitivos a través de las exigencias o deseos de sus padres. Memi, la protagonista del documental se enfrenta a esta problemática en las vísperas del carnaval más importante de su pueblo y del que su madre pretende que salga ganadora en el concurso de belleza que se celebra tradicionalmente año a año en el lugar. Y por último, entre mis favoritas, recomiendo el cortometraje español Tres mujeres (Alexis Delgado Burdalo, 2014). Ganador de una Mención Honorifica a Mejor Corto en Tenerife y nominado al MecalPro de Barcelona, este film se presenta con una propuesta fuerte y conmovedora. Tres mujeres privadas de su libertad cuentan sus desgarradoras historias frente a cámara buscando reflexionar sobre los mitos estigmatizadores de la cárcel, el concepto de la libertad y los caminos inciertos que a veces nos depara el destino. La cámara de Alexis Delgado se posa en una profunda mirada sobre pequeñas biografías de personas comunes que dan a conocer la experiencia de su vida desde alguna prisión de este mundo. Encontramos otras obras documentales como: Zima (Cristina Picci, 2013) que busca la reflexión de la vida a través de los ciclos de nuestra existencia, Autonomus (Alexander Rynéus & Per Eriksson, 2014), Film Sound (Cesar Gananian & Alexandre Moura, Brasil, 2014), Keeping Balance (Bernhard Wenger, 2015), o Blossom with Tears (Huaqing Jin, China, 2013), entre otros.
A igual que en las demás competencias, solicito no dejar pasar ninguna producción e invito especialmente a observar también Elena Ansis: Génesis, el biográfico de la poeta española considerada una de las más influyentes del arte en el siglo XX y pionera del conceptualismo en España.
Para finalizar, me gustaría compartir con los lectores mi investigación sobre la etimología de la palabra “Guarimba” y que según he leído proviene del alto alemán y da a entender su significado como un lugar de refugio o una guarida.
El Festival Internacional La Guarimba 2015 nos invita desde el 7 al 11 de Agosto a refugiarnos en miles de historias y relatos que hablan de uno mismo, que hablan de vos, de él, de ella, de nosotros… Que habla del PUEBLO.
Un festival que en su alma y desde su inicio hace tres años, solo pretende abrir espacios de libertad logrando que el arte se convierta en una herramienta colectiva que pueda compartirse, pensarse y transmitirse como el triunfo de la cultura popular y que en nuestras vidas podamos tener un lugar de encuentro que nos identifique, un lugar que nos proteja, un lugar en donde dejemos volar nuestras fantasías. Ese refugio se expresa en una pantalla de cine en donde por fin los pueblos son los verdaderos protagonistas de la película.