Sinais en curto
Lo perdurable y lo perecedero Por Fernando Solla
Si quieres ser un cineasta, lo mejor que puedes hacer
es entregarle al mundo parte de tu propia historia
¿Qué marca dejamos como individuos tras nuestro paso por el mundo, ya sea en nuestro entorno más inmediato o en los seres que nos preceden o suceden en este camino? ¿Y el cine? Si la finalidad de todo acto comunicativo consiste en intercambiar información a través de un código y canal determinado, ¿cómo consigue el cine mostrar a través de sus múltiples formas lingüísticas el peso de una vida?
La objetivación de algo tan subjetivo como es la individualidad de cada ser es algo que sólo puede mostrarse a través de señales (sinais). Muchas veces, tanto cineastas como espectadores, intentamos afiliarnos por analogía a nuestro contexto demográfico y social más cercano. Siempre en grupo, analizamos por bloques, priorizando lo general y dejando el caso aislado para última instancia. El (S8) llega a su 7ª Mostra de Cinema Periférico fiel a la creencia de que esto no es así. Organizando toda su logística de dentro hacia fuera, el certamen apuesta de nuevo por un evento de vocación internacional visibilizando A Coruña como sede principal. Sus diversas secciones aúnan los puntos comunes de todas las manifestaciones artísticas y su relación con el séptimo arte y, por si fuera poco, evocando con su nomenclatura el formato de cine doméstico y su función hoy en día.
La sección Sinais en curto de esta edición ha proyectado un total de nueve cortometrajes, todos ellos rodados entre 2015 y 2016. En corto porque muestran momentos muy concretos, señales y evidencias. En Súper 8 y 16mm porque son los formatos domésticos los que crean la ilusión de recuperar la memoria más reciente a través de la captación de imágenes y sonidos cotidianos y de técnicas expresivas experimentales.
Jeanette
Materia Prima. Natalia Porca, España, 2015, vídeo, 4 min.
Materia prima nos propone un viaje en primera persona que la autora realizará por su memoria. El pasado, el presente y el futuro a través de los recuerdos localizados en tres casas. A través del día a día y el mantenimiento de ciertas maneras de actuar y relacionarse con el medio el pasado se convertirá en presente. Los humanos mudamos pero mucho más rápido que nuestro entorno. Tras un camino de piedra al que nadie llega se detiene el tiempo y empieza la vida secreta. Un exterior aparentemente inhóspito contrastará con el ritmo interior de un hogar. Una parada para cerciorarnos que todavía tenemos la vida por delante como retrato cinematográfico del futuro que todavía no hemos vivido. Que será presente y después pasado. Unas imágenes envueltas de un sonido naturalista y que en voz de la autora nos confiesan que la materia prima de la vida son los recuerdos. O los sueños. Estar, quedarse y marchar. Si la materia prima de la vida son los recuerdos y éstos son caprichosos y aleatorios, ¿elegimos nuestra propia identidad de manera selectiva? El paso del tiempo: lo que antes era un campo ahora es una piscina. Personalísimo y emotivo cortometraje.
Beleza do Verán. Mar García, España, 2015, vídeo, 4 min.
Situándonos en la cara opuesta de la misma moneda contemplamos Beleza do verán. Aquí lo que se refleja de nuestro paso es lo no perdurable. A través del uso expresivo de la iluminación evocaremos de nuevo desde el presente algo (o alguien que ya no está). A través de paseos por los claros y oscuros de un bosque filmados a contraluz, observaremos el crepúsculo de un verano. La cámara seguirá a la protagonista a sus espaldas pero cuando ella parezca darse cuenta de su presencia, la imagen se desviará hacia el paisaje y ella desaparecerá ¿Cómo filmar la melancolía? Plantando una flor que muy probablemente morirá antes de que termine el verano. La peculiaridad de esta pieza consiste en el uso de la capacidad predominante de la imagen como canal transmisor de lo que se quiere contar.
Jeanette. Xurxo Chirro, España, vídeo, 2016, 8 min.
Concretando todavía más, llegamos a Jeanette. Sólo con el título podemos evocar la célebre canción y su letra aunque no hará mucha falta. El montaje y la fotografía son los encargados de contar la historia a través de primeros y primerísimos planos del rostro de la protagonista. Oiremos diálogos y réplicas del resto de personajes, pero apenas de ella. El abismo de la adolescencia a través de una mirada fija. Fundidos a negro que separarán escenas de duración variable. Y en ocho minutos tendremos tiempo de conocer desde el primer amor de la protagonista hasta de contemplar el salto generacional de las relaciones afectivas familiares. De los problemas con la madre a la comprensión de la abuela. También de repasar las nuevas maneras de comunicación en lo que supone la plasmación en imágenes de una contradicción. La incomunicación a través de las redes sociales. Un título a tener muy en cuenta el de Xurxo Chirro.
Homes
Homes. Diana Toucedo, España, 2016, vídeo, 11 min.
Una historia sobre la ausencia y desaparición masculina durante nuestra guerra civil contada a partir de las acciones cotidianas de sus mujeres hoy en día: Homes. Una suerte de monólogos interiores silenciosos sobre la espera. El efecto óptico de la fotografía de este cortometraje es asombroso. Las mujeres aparecerán en sus cocinas como hologramas superpuestos y traslúcidos, ocupando distintas posiciones en un único espacio y tiempo. La fuerza narrativa de este recurso para mostrar la desposesión de una vida que se siente como ajena y la suspensión en un tiempo a medio camino entre el sueño y la vigilia es muy poderosa. Así como el rostro de esas mujeres capaz de mostrar la última chispa de esperanza a la vez que la desilusión más absoluta. El recurso de las voces en off masculinas los convierte a todos en espectros, a ellas a través de la imagen, a ellos a través del sonido. Emocionante documento que planta cara a la muerte del alma y el espíritu.
Trazos. Alberte Branco, España. 2016, 16mm transferido a vídeo, 9 min.
Trazos supone el debut de su realizador, hasta ahora director de fotografía. Un principio que es a la vez retorno a la filmación en 16mm. A medio camino entre la poesía y el ejercicio etnográfico, veremos a una serie de habitantes de San Sadurniño que nos explicarán uno a uno y de manera individual cuál es su relación con el espacio favorito de su aldea. Un mapamundi de la vinculación del espíritu humano a la tierra como configuradora de su identidad. De nuevo, el eterno retorno a un recuerdo. La técnica, en este caso, tratará a la imagen actual de un modo que parecerá que estamos viviendo el recuerdo en primera persona y no a través de la narración.
Subida ao cerro. Gonzalo E. Veloso, España, 2015, vídeo, 5 min.
¿Cómo filmar el bucle en el que nos sumimos cuando repetimos una y otra vez un recuerdo? ¿Esa reverberación u onda expansiva? Subida ao cerro es capaz no sólo de fijar nuestra mirada sino de mantener nuestra atención activa en unas imágenes que retratan una ascensión a un cerro a la vez que se desdoblan y multiplican en el plano, consiguiendo filmar el camino mental tantas veces recorrido en una sola secuencia. De alguna manera tenemos la sensación de contemplar las imágenes de personas en slow motion, superpuestas sobre un espacio natural cuya imagen se muestra acelerada. El proceso que sigue la memoria para reconstruir imágenes. Lo que es real y lo que sólo son proyecciones de nuestra mente compartiendo plano. El peso narrativo al completo sobre el tratamiento de la imagen.
Subida ao cerro
Toxos e flores. Lucía Vilela, España, 2016, super 8 transferido a vídeo, 4 min.
Con Toxos e flores nos acompaña en su particular recorrido por el paisaje rural gallego. Utilizando el Super8 para filmar cada fotograma, asistiremos a la evolución del entorno a través de la alternancia de imágenes de lo que la autora denomina “arquitecturas naturales” con “naturalezas muertas” a causa de la acción del hombre. La historia de una transformación paisajística. Luz y color y su composición de las formas. Verde y marrón predominantes. Excelente montaje sincopado con prólogo incluido. El descubrimiento de una fábrica en el bosque nos mostrará como resultado montones de troncos cortados, incluso destruidos y cemento. La captación del sonido ambiente (obra de Marcos Flórez) enfatiza la pureza que transmiten las imágenes de los árboles y las flores que todavía resisten en contraposición al audio de lo que empieza a ritmo de thriller y termina reconociéndose como una canción tradicional.
O tempo da mazá. Miguel Mariño, España, 2015, 16mm, 5 min.
O tempo da maza es el resultado de la manipulación de distintas técnicas artesanales y un plateado blanco y negro en 16mm. Los distintos ciclos de la vida, siempre femenina, a través de la filmación de mujeres de distintas generaciones que comen una manzana cuando llega el tiempo y la descubren en el árbol. Visualmente elocuente, sorprende por un uso del sonido ambiente en diferido. Nunca en el mismo plano que las imágenes (seguramente tampoco temporal). La recreación de las distintas épocas se explicita magníficamente a través del tratamiento de la imagen. La saturación de la luz y los cambios de plano, así como la yuxtaposición y confusión de formas redondas (de las manzanas con las caras de las mujeres) como una explosión lumínica para filmar lo perdurable de algunas costumbres a través del paso del tiempo.
Historia Cerebro. Borja Santomé Rodríguez, España, 2015, vídeo, 5 min.
Finalmente, un corto de animación. Historia Cerebro es un regalo para la vista. Los gráficos de tinta negra sobre acetato son capaces de resumir a través de la carga de las imágenes toda la libertad de cualquier movimiento expresionista. Explorando técnicas experimentales para narrar una historia, el realizador nos sumerge en una auténtica película de cine negro. El tratamiento del sonido amplificará la sensación digresiva de dimensiones y espacios. Un crimen durante lo que parece una fiesta tradicional servirá de excusa para dibujar la velocidad a la vez que todo se cubre de negro. Un negro que tanto puede reflejar el caos como la materia gris de un detective alcoholizado. Hitchcock planea por esta sobresaliente pieza animada. Una de las mejores vistas en los últimos tiempos.
Historia Cerebro
Hasta aquí esta espectacular etapa de Sinais en curto. Nueve títulos que funcionan perfectamente como piezas acabadas y únicas pero que, tras un visionado conjunto, ofrecen un reconfortante soplo de aire fresco. A la vez, la constatación de las inquietudes de los profesionales del audiovisual de nuestro país por seguir investigando y desarrollando sus historias situando en primer plano cinematográfico la entidad y fortaleza de la imagen como el elemento indispensable para que la comunicación y el intercambio de conocimiento suceda con éxito. Y por supuesto, la conexión con el territorio de origen.